El auge y crecimiento de la minería e industria en las primeras décadas del siglo pasado, así como el desarrollo del derecho del trabajo y la seguridad social, hicieron evidente que se necesitaba un programa de salud ocupacional que permita prevenir accidentes y enfermedades ocupacionales; controlar los riesgos ocupacionales, la contaminación ambiental y que hiciera posible la sostenibilidad de las actividades económicas sin costos ni confictos sociales.
El 5 de agosto del año 1940 el DS 1818 crea el Departamento de Higiene Industrial, en el Ministerio de Salud Pública, Trabajo y Promoción Social, financiado desde 1947 con el aporte del 1,8% de la planilla de las empresas mineras (Ley 10833).
En 1948, en base a un acuerdo entre Perú y Estados Unidos, el Servicio Interamericano de Salud Pública asume la administración del Departamento; con sus aportes y los de la Ley 10833, el personal recibe capacitación en el extranjero y se equipa con alta tecnología de la época en medicina e ingeniería ocupacional y ambiental; en laboratorio clínico, químico toxicológico y una biblioteca especializada.
Profesionales con reconocimiento mundial como el Dr. Vintinner y el Ing. Bloomfeld trabajaron varios años en el Departamento de Higiene Industrial o Instituto de Salud Ocupacional (INSO) del Perú. El INSO fue el primero en crearse en la región andina y, en reconocimiento de su desarrollo, fue el centro de capacitación para la región.
Para ampliar su cobertura, a partir de 1957 se descentraliza el Instituto de Salud Ocupacional con la creación de tres unidades regionales ubicadas en las ciudades de La Oroya, Trujillo y Arequipa, cubriendo así las regiones del centro, norte y sur respectivamente.
Desde 1956 hasta mediados de los años setenta se publicó la Revista del Instituto de Salud Ocupacional. Entre los artículos publicados, podemos mencionar temas como el trabajo en altura; valores hemáticos y trabajo minero; aspectos radiográfcos cardiopulmonares en el mal de montaña; presión arterial en mineros; presión arterial en trabajadores a 4600 metros de altitud; diagnóstico de silicosis; aplicación de la cromatografía de gases a los estudios de ventilación pulmonar; estudio comparativo entre el detector ultravioleta y los métodos químicos para la determinación de vapores de mercurio en aire; entre otros. Entre 1956 y 1970 se publicaron 189 trabajos, entre los que están incluidos los mencionados anteriormente .
El INSO fue reconocido en todos los sectores laborales, principalmente en el minero; prueba de ello es que las principales normas sobre Salud Ocupacional de los años cincuenta hasta los noventa lo mencionan.
El año 1991, con RM 0009-91-SA/ DM se aprueba la Apertura Programática de Actividades del Ministerio de Salud, en ella se considera al INSO como parte del Instituto Nacional de Salud. En 1994 con RM 552-94-SA/DM es considerado fenecido y sus recursos y funciones pasan a la Dirección General de Salud Ambiental del Ministerio de Salud.
Se desactiva la unidad de Lima y sus tres unidades regionales y la única biblioteca especializada en salud ocupacional del Perú, lo que ocasionó pérdida de gran parte de su material bibliográfico e informes técnicos de visitas de reconocimiento, evaluación de riesgos y exámenes médicos realizados.
Estos informes técnicos eran importantes pues permitían adecuados seguimientos a las empresas, principalmente mineras. Sin embargo, el 26 de julio de 2001 se publica en el diario ofcial “El Peruano” la RM 413-2001-SA/ DM que reintegra el Instituto Nacional de Salud Ocupacional a la estructura orgánica del Ministerio de Salud, denominándolo Instituto de Salud Ocupacional “Alberto Hurtado Abadía”; asimismo, se establece que los recursos y todo lo que fue transferido del ex-INSO a la Dirección General de Salud Ambiental, sea transferido al Instituto de Salud Ocupacional “Alberto Hurtado Abadía”.

El 2002, la Ley del MINSA (Ley 27657) une al Instituto de Salud Ocupacional “Alberto Hurtado Abadía” con el Instituto Nacional de Protección del Ambiente para la Salud (INAPMAS) denominándolo Centro Nacional de Salud Ocupacional y Protección del Ambiente para la Salud (CENSOPAS) y pasa a ser uno de los órganos técnicos del Instituto Nacional de Salud.
Si bien Lima se viene fortaleciendo, en las regiones aún no hay instituciones que aborden la salud de los trabajadores y poblaciones expuestas, a la contaminación relacionada con las actividades económicas; queda todavía sin cubrir, lo que las ex unidades regionales de salud ocupacional realizaban.
El poco conocimiento sobre salud ocupacional, ha generado que tengamos normativas dispersas y con vacíos técnicos además de desconocimiento de la magnitud y distribución de estos problemas. Las estadísticas sobre accidentes de trabajo tienen alto subregistro y sobre enfermedades ocupacionales la situación es aun más crítica, pues son limitados los recursos humanos capacitados para realizar diagnósticos de enfermedades ocupacionales.
En los últimos años CENSOPAS viene desarrollando actividades con la Organización Internacional del Trabajo y con la Universidad Peruana Cayetano Heredia, para capacitar profesionales y técnicos, pero aún es insufciente; por lo tanto, se requiere que las universidades participen para poder contar con los profesionales y técnicos que el país requiere.
También, pese a las limitaciones, CENSOPAS viene fortaleciéndose en tecnología y capacitando a sus profesionales en el extranjero; asimismo, el marco legal actual, al aprobarse la Ley 29783 “Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo” en agosto de 2011 y aprobarse su Reglamento, entre los múltiples aspectos que aborda, designa a CENSOPAS como miembro del Consejo Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo.
Este mecanismo de concertación permite el desarrollo de la salud ocupacional; prevenir los accidentes y enfermedades ocupacionales que sufren los trabajadores y afectan a sus familias y a las empresas promoviendo su competitividad sostenible; a las autoridades, organizaciones laborales y empresariales, poder sumar esfuerzos para asumir en conjunto el reto de la seguridad y salud en el trabajo, y contribuir al desarrollo de nuestro Perú.
Artículo publicado en la Revista Seguridad Minera n°100. Escrito por Juan M. Cossio-Brazzan, Psicólogo del Centro Nacional de Salud Ocupacional y Protección del Ambiente para la Salud.
Tomas Anibal Salas Culli dice
Espero recibir mas informacion de los servicios que ofrece al publico . presto mis servicios en una empresa privada y quisiera realizar un examen de mi estado de salud no se si realizan estos examenes en la institucion, agradeciendo por la informacion que me brinden.
Seguridad Minera dice
Estimado Tomas, la revista no ofrece servicios de consulta en salud ocupacional. Por otro lado, la institución a la que pertenecemos, el ISEM, se dedica a la capacitación de los trabajadores mineros. Le compartimos información sobre empresas de salud ocupacional http://www.ceroaccidentes.pe/servicios/salud-ocupacional/