La protección adecuada para los ojos depende del tipo de riesgo existente en el lugar de trabajo. Las lesiones a los ojos se dividen en tres categorías: físicas, químicas y térmicas, explican especialistas del Departamento de Seguros de Texas.
Físicas
De acuerdo con el Departamento de Estadísticas Laborales (Bureau of Labor Statistics-BLS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, casi el 70% de los daños por causas físicas a los ojos son el resultado de objetos que caen o salen volando, o chispas que golpean el ojo. Otras lesiones fueron ocasionadas por objetos que columpiaban de una posición fija (ramas de árboles, cuerdas/sogas, cadenas o herramientas).
Las partículas pequeñas de movimiento rápido, como por ejemplo los desechos generados al lijar, moler, partir, o al realizar trabajos similares, son la causa más común de lesiones a los ojos. Una partícula que se mueve rápido, más pequeña que un grano de arena, puede llegar a causar mucho daño a un ojo sin protección. Aún las partículas pequeñas que se mueven lentamente, como por ejemplo el polvo, pueden rayar la superficie del ojo.
Si bien los riesgos derivados de la exposición a partículas rápidas exigen el uso de lentes de seguridad o anteojos protectores, debe tomarse en cuenta además la resistencia a las rayaduras. Las condiciones especiales del ambiente de trabajo determinarán la protección adecuada para los ojos.
Químicas
Las exposiciones químicas conforman una quinta parte de las lesiones a los ojos (BLS). El daño a los ojos debido a alcalinos o ácidos cáusticos puede ser extremadamente grave. El hidróxido de sodio (soda cáustica, lejía) empieza a destruir el tejido del ojo dentro de un décimo de segundo. Los “irritantes” químicos son menos severos. El trabajo con químicos expone a los ojos a salpicaduras, vapores, y humos. La mejor protección para los ojos al trabajar con químicos es el uso de anteojos protectores de seguridad con ventilación directa. Los ambientes extremadamente peligrosos requieren del uso de anteojos protectores con ventilación indirecta y es necesario que estén recubiertos con un agente antiempañante.
Térmicas
Un visor es la mejor protección contra el calor. Son preferibles los visores de acetato u otros visores de plástico flexible que puedan cubrir la cara y el cuello. Siempre utilice lentes de seguridad o anteojos protectores abajo del visor. Bajo un calor extremo o en ambientes de luz concentrada puede ser necesario un casco de soldador.
Prevención
Para prevenir lesiones a los ojos en el lugar de trabajo, se debe realizar un análisis profundo de las operaciones de la planta, recomientas el Departamento de Seguros de Texas. Se debe revisar las áreas de trabajo, rutas de acceso y el equipo, poniendo énfasis en los riesgos de una lesión a los ojos. También se debe identificar labores y áreas que presentan riesgos potenciales para los ojos a través de la revisión de los registros de accidentes y lesiones a los ojos.
Una vez que los peligros hayan sido identificados, las lesiones a los ojos pueden prevenirse mediante adiestramiento y mantenimiento del equipo.
Adiestramiento
El adiestramiento sobre la selección y uso de protección para los ojos reducirá el número de lesiones. Los empleados deben reconocer cuál es la protección adecuada para los diferentes ambientes que existen en su lugar de trabajo. Se requiere protección para los ojos para todos los empleados que trabajen con:
- Polvo, concreto y partículas de metal.
- Desechos en desplome o en movimiento, materiales de construcción, vidrio.
- Humo, gases nocivos/venenosos.
- Químicos (ácidos, bases, combustibles, solventes, cal, polvo de cemento seco o mojado).
- Luz de soldadura y arco eléctrico.
- Peligros térmicos e incendios.
- Patógenos sanguíneos (hepatitis o VIH) de sangre, fluidos corporales, restos humanos.
Mantenimiento del equipo
El mantenimiento diario y programado de los anteojos de protección es obligatorio. Para reducir el riesgo de sufrir lesiones a los ojos, un mantenimiento adecuado debe incluir lo siguiente:
- Ajuste los anteojos para que queden justos y cómodos.
- Asegure las partes sueltas.
- Reemplace los rayados, cuarteados, con agujeros o decolorados.
- Límpielos después de cada turno o según sea necesario.
- Límpielos siguiendo las instrucciones del fabricante.
- Lávelos con agua tibia y jabón y enjuáguelos bien.
- Use desinfectante y cuélguelos en lugar limpio para que se sequen.
- Guárdelos en un estuche para evitar que se rayen.
- Use producto antiempañante para reducir o eliminar que se empañen.
- Marque los anteojos de cada persona con su nombre.
- Requiera a cada empleado ser responsable de revisar sus anteojos.
Las lesiones a los ojos son la causa más común y evitable de la ceguera, aseguran los expertos del Departamento de Seguros de Texas. Los trabajadores pueden prevenir las lesiones a los ojos usando los anteojos de protección adecuados y siguiendo las indicaciones de seguridad de la empresa.
Deja un comentario