Por: Pablo Pinto. En poco tiempo Pokémon Go es el juego más popular en el mundo y tiene cautivado a jóvenes y adultos por igual. Publicistas, vendedores, empresarios, transportadores y otros profesionales han visto oportunidades para sacarle provecho a este boom.
Sin embargo, los comentarios que he visto por parte de los especialistas en seguridad y salud en el trabajo es que este juego puede ser peligroso y que puede ocasionar accidentes. ¿Y si adicional a evaluar los riesgos del juego, vemos cómo poderle sacar provecho y aplicarlo en las actividades de crear una cultura de trabajo seguro?. Aquí les dejo una de estrategia que hemos implementado con éxito en unas empresas del Perú.
En una planta industrial redujimos el tiempo de la formación teórica de la Inducción en Seguridad y Salud Ocupacional de los nuevos empleados a fin de que pudiera hacerse una parte práctica. Aprovechando que más del 90% de los trabajadores que ingresan a laborar en esa empresa tienen smartphone, se realizó una estrategia para que aprovechar el boom de Pokémon Go.
Primero seleccionamos los pokemones que tenían algún tipo de vínculo con los peligros de la empresa. Por ejemplo: Pikachu con el peligro eléctrico o Charmander con materiales inflamables. Luego creamos unos códigos QR con la información de esos peligros y sus respectivos correos y después imprimimos unos stickers con los pokemones seleccionados. En la parte de abajo tenían el código QR que habíamos creado. Estos stickers se pegaron en los lugares donde estaban presentes los peligros seleccionados.
Finalmente los trabajadores salían con sus smartphones a “atrapar” pokemones. Por ejemplo cuando “atrapaban” a Pikachu, el lector QR les indicaba que esa máquina operaba a 440 voltios y 170 amperios. También informaba que su mantenimiento requería un permiso de trabajo eléctrico, usar equipos de protección dieléctricos, etc. Reforzando así la inducción en seguridad de una forma práctica y divertida.
Gamificación y capacitación laboral: el cambio de perspectiva
Para terminar les cuento una anécdota personal. Uno de mis primos, menores que yo, tenía problemas para aprender inglés. Él decía que no le gustaba, que era muy difícil y no le entendía a la profesora. Su mama me pidió que le diera unas clases para que no perdiera la materia en la escuela. Estuvimos como dos horas estudiando, noté que tenía muy poco vocabulario y gramática, luego me dijo que le permitiera ver un programa de TV y que al finalizar retomaríamos la clase. Me quedé con el viendo el programa, se trataba de Pokemon.
Cuando comenzó el capítulo lo vi emocionado, se sabía los 150 nombres de los pokemones, había uno en ese capítulo que tenía forma de mariposa, le pregunté ¿Cómo se dice mariposa en inglés? y él me dijo que no sabía, entonces señalé a ese personaje y le pregunté ¿cómo se llama ese pokemon? Y me dijo: Butterfly. Cuando le expliqué que butterfly era mariposa en inglés casi no lo puede creer.
Luego miramos el significado del nombre del programa y cada personaje, resulta que él sabía muchas palabras en inglés pero no sabía que estaban en ese idioma. Al enterarse se dio cuenta que en realidad ese idioma no era tan difícil, después de unas varios meses llegó a aprender a leer, escribir y a hablar en inglés.
¿Puede un cambio de perspectiva hacer que algo que no nos guste, empiece a parecernos más atractivo? ¿Si presentamos las medidas de prevención de incidentes de una forma más amena podría tener mayor impacto en los trabajadores? Sin duda. Esta es una ardua labor que tenemos los especialistas en prevención de riesgos laborales: hacer que los trabajadores dejen de ver a las normas de seguridad como un conjunto de reglas para hacer su labor más tediosa.
Debemos lograr que los trabajadores:
- No solo cumplan las normas por obligación sino por convicción.
- Que usen sus EPI/EPP aun cuando están solos y no solo cuando están bajo supervisión.
- Que asistan con gusto a las capacitaciones de prevención y no porque es un deber.
Pablo Pinto Ariza Presidente de la Asociación de Prevencionistas de Riesgos-ADPR |
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