La conducción segura de vehículos requiere adoptar una actitud en el manejo conocida como manejo defensivo. El conductor defensivo se caracteriza por lo siguiente:
- Toma en consideración la falta de destreza y conocimiento del otro conductor.
- Es educado y cortés, permitiendo el pase a los peatones y vehículos.
- Hace señales manuales y luminosas a tiempo, y en forma correcta.
- Cede el derecho de vía y otras concesiones para evitar accidentes.
- Está siempre alerta a maniobras de otros conductores y peatones.
- Maniobra anticipadamente al tomar curvas, detenerse o adelantar.
- Mantiene su vehículo en buenas condiciones.
- Evita conducir en condiciones físicas deficientes: ebrio, cansado, somnoliento, etc.
- Conduce a velocidad adecuada a las condiciones del vehículo, pista y ambiente.
- Cumple el reglamento de tránsito y maneja de acuerdo con las señales de la ciudad o la carretera.
Por el contrario, un conductor agresivo es identificable porque:
- Se impacienta, aturde con el claxon e insulta a otro conductor por la más leve falta o demora.
- Es mal educado y descortés con conductores y peatones y les “mete” el vehículo.
- Le importa muy poco las señales y, cuando las hace, hay que adivinar lo que significan.
- Se aferra a su derecho de vía y “mete” el carro.
- Maneja pensando en sus problemas y no le importa conductores o peatones.
- Efectúa apuradamente lo que debió efectuar antes, al tomar curvas, pasar o parar.
- Solo se preocupa cuando el vehículo queda fuera de operación.
- Alardea de su capacidad de manejar aún ebrio, con sueño, cansado, etc.
- Conduce rápido sin importarle condiciones de pista, vehículo, ambiente, etc.
- Se burla del reglamento y de las señales de quienes la respetan en ciudad o carretera.
Marty dice
Buena informacion
Ingrid soto S M dice
Soy estudiante de conducir y este es un buen aporte ya que aún no salgo a la pista.
Seguridad Minera dice
¡Muchas gracias! Esperamos que mantenga su atención en nuestro sitio web.