La industria minera dedicada al carbón es una de las más riesgosas debido a las condiciones del terreno y las operaciones bajo tierra. La Office of Mine Safety and Health Research de Pittsburg (Estados Unidos) publicó un estudio titulado «Assessing the Safety Culture of Underground Coal Mining: Results and Recomendations», enfocado en la evaluación de la cultura de seguridad en el sector.
El objetivo principal del texto es analizar y comprender la cultura de seguridad en la industria minera dedicada al carbón mediante la identificación de los puntos fuertes y las áreas de mejora en términos de prácticas de seguridad, actitudes de los trabajadores y cumplimiento de los protocolos de seguridad.
Acerca de las recomendaciones, el documento aconseja mejorar el sistema de comunicación en todos los niveles. «La comunicación es fundamental porque, no solo es un medio para transmitir información, sino que también desempeña un papel crucial en la coordinación del trabajo, la gestión del cambio y el énfasis en los valores organizacionales centrales», señalan.
Igual de importante es hacer que la seguridad sea un valor para la ejecución de las operaciones mineras. Se recomienda fomentar una mayor participación y propiedad de los empleados en la resolución de problemas y la toma de decisiones, según corresponda, así como promover y facilitar esos comportamientos por parte de un equipo de liderazgo que modele y exhiba acciones consistentes con el objetivo de desarrollar la seguridad como un valor claramente reconocido.
Respecto a la capacitación del personal, el uso de programas de incentivos basados en lesiones no necesariamente previene las mismas. En cambio, estos programas a menudo tienen el resultado opuesto y recompensan a los empleados que se arriesgan, pero tienen la suerte de no lesionarse, o recompensan a los empleados que no informan los incidentes.
«Los incentivos basados en la producción recompensan a los empleados por hacer el trabajo sin importar qué, incluso si eso significa trabajar de manera insegura. Una cultura de seguridad de alto rendimiento es aquella que fomenta hábitos de trabajo seguros y la notificación de condiciones peligrosas, accidentes, lesiones, incidentes y casi accidentes», explican.
Hay que tener en cuenta que los programas de incentivos basados en las lesiones y en la producción a menudo funcionan en contra de esto. En vez de recompensar a las personas por evitar lesiones o cumplir con los objetivos de producción, las minas deberían considerar recompensar los comportamientos seguros que están directamente relacionados con el resultado deseado de mejorar la seguridad.
Finalmente, hay que considerar la falta de formalidad en la implementación de nuevos procesos organizacionales que fomenta la persistencia de conductas indeseables. Esta práctica hace que sea complicado responsabilizar a los empleados respecto a las expectativas y estándares establecidos por la gerencia, generando confusión y dando lugar a un trato dispar entre los empleados. Una implementación más formal de los procesos sería beneficiosa para hacer un cambio de comportamiento en todos los niveles. Este proceso debería definir claramente los estándares y criterios relacionados con el cambio, establecer el método de comunicación utilizado para implementar nuevos estándares o expectativas, y especificar las consecuencias de no cumplir con dichas expectativas en el proceso de implementación.
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