En las operaciones mineras a cielo abierto, la identificación del peligro y la evaluación del riesgo son procesos críticos que contribuyen a garantizar la seguridad de los trabajadores y la integridad de las instalaciones. Dada la naturaleza inherentemente riesgosa de este entorno de trabajo, donde se manipulan maquinaria pesada, se utilizan explosivos y se realizan excavaciones a gran escala, es fundamental identificar los posibles peligros y evaluar los riesgos asociados.
De acuerdo con la Oficina Internacional del Trabajo en el documento «Seguridad y salud en las minas a cielo abierto», el empleador -en consulta con los trabajadores y sus representantes- debería establecer un sistema para identificar los peligros y evaluar los riesgos para la seguridad y la salud, y aplicar medidas para controlar dichos riesgos respetando el siguiente orden de prioridad:
- Eliminación del peligro.
- Control del riesgo en la fuente, mediante sustituciones o controles técnicos.
- Reducción del riesgo al mínimo por diversos medios, entre otros, el diseño de sistemas de trabajo seguros.
- En la medida en que el riesgo persista, suministro de equipo de protección personal, teniendo debidamente presente lo que sea razonable, practicable y factible y lo que se ajuste a las buenas prácticas y al ejercicio de la debida diligencia.
Hecho lo anterior, el empleador debería establecer, poner en práctica y conservar los registros documentados de las siguientes actividades: identificación del peligro, evaluación del riesgo, control del riesgo y seguimiento y evaluación de la eficacia de las actividades arriba mencionadas.
Identificación del peligro
- La situación, los sucesos o la combinación de circunstancias susceptibles de producir lesiones o enfermedades.
- La naturaleza de la posible lesión o enfermedad derivada de la actividad, producto o servicio.
- Las lesiones, los sucesos peligrosos y las enfermedades anteriores.
- La manera en que se organiza, gestiona y realiza el trabajo, y todo cambio conexo.
- El diseño de los lugares de trabajo, los procesos de trabajo, los materiales, las instalaciones y el equipo.
- La fabricación, la instalación, la puesta en servicio y la manipulación y eliminación de materiales, los lugares de trabajo, las instalaciones y el equipo.
- La adquisición de bienes y servicios.
- La subcontratación de instalaciones, equipo, servicios y trabajadores, incluida la especificación mediante contrato de las responsabilidades asignadas y asumidas por los contratistas.
- La inspección, el mantenimiento, la prueba, la reparación y la sustitución de instalaciones y equipo.
Evaluación del riesgo
La evaluación del riesgo es un paso importante para determinar cuán probable es que ocurra un accidente o enfermedad debido a los peligros en el lugar de trabajo. Todos los riesgos deben ser evaluados y se debe establecer un orden de prioridad para manejarlos según su gravedad. Cuanto mayor sea el riesgo, más importante será abordarlo primero. En este proceso, se considera qué tan probable es que ocurra un accidente y qué tan grave podría ser. Hay diferentes métodos y técnicas que se pueden usar para evaluar el riesgo, todos reconocidos y establecidos.
Control del riesgo
Salvo que se elimine un peligro determinado o se evite la exposición al mismo, el riesgo asociado a ese peligro nunca podrá extinguirse por completo. El empleador debería planificar la gestión y el control de las actividades, productos y servicios que representan o puedan representar un riesgo importante para la seguridad y la salud.
Evaluación
Los procesos de identificación del peligro y de evaluación y control de los riesgos deberían estar sujetos a una evaluación documentada de su eficacia y, de ser necesario, modificarse a fin de establecer un proceso de mejora permanente. En las evaluaciones se deberían tener en cuenta los avances tecnológicos, así como los conocimientos y experiencias adquiridos en los planos nacional e internacional.
Puedes leer aquí el documento completo de la Oficina Internacional del Trabajo.
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