El manejo y almacenamiento de explosivos en la minería es una operación crítica que requiere de estrictas medidas de seguridad. Según el artículo «Safety & health in small-scale surface mines» elaborado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el material explosivo en minería incluye explosivos, agentes de voladura y detonadores. Estos elementos, debido a su naturaleza altamente peligrosa, necesitan ser manipulados y almacenados bajo rigurosos protocolos para garantizar la seguridad de los trabajadores y del entorno.
Explosivos y sus componentes: un riesgo controlado
Los explosivos, definidos como cualquier compuesto químico, mezcla o dispositivo diseñado para producir una explosión mediante una reacción química, son utilizados ampliamente en la minería. Entre los más comunes se encuentran la pólvora negra, la nitroglicerina y la dinamita. Los detonadores, esenciales para iniciar la explosión, contienen una carga detonante y pueden ser eléctricos o no eléctricos. Por otro lado, los agentes de voladura, como el nitrato de amonio, se vuelven explosivos al mezclarse con un hidrocarburo.
Requisitos para las operaciones de voladura
Las operaciones de voladura en una mina solo deben realizarse con la aprobación de la autoridad minera correspondiente. Es crucial que únicamente se utilicen explosivos y detonadores aprobados y proporcionados por el operador de la mina. Además, es imperativo que estas operaciones sean dirigidas por personal capacitado, certificado y con experiencia en el manejo de material explosivo. El operador de cada mina es responsable de proporcionar el equipo y los materiales necesarios para llevar a cabo las voladuras de manera segura.
Almacenamiento seguro de material explosivo
El almacenamiento de explosivos debe realizarse en polvorines que cumplan con requisitos específicos para garantizar la seguridad. Estos deben ser estructuralmente sólidos y estar hechos de materiales incombustibles o recubiertos con materiales resistentes al fuego. Además, el interior debe estar revestido con materiales que no produzcan chispas y contar con orificios de ventilación para controlar la humedad y el calor excesivo.
Es fundamental que estos polvorines tengan señales de advertencia claras indicando su contenido, se mantengan limpios y secos, y estén cerrados con llave cuando no estén vigilados. Los polvorines deben ser utilizados exclusivamente para almacenar material explosivo y, si son de metal, deben estar conectados a tierra. Asimismo, es crucial mantener un área libre de basura, maleza y otros materiales combustibles en un radio de 10 metros alrededor del polvorín.
Separación de detonadores y explosivos
Para evitar accidentes, los detonadores no deben almacenarse en el mismo compartimento que otros explosivos. Si deben compartirse el polvorín, es necesario que se almacenen en compartimentos separados para evitar la contaminación y el riesgo de explosiones accidentales. Además, los agentes detonantes deben mantenerse alejados de mechas de seguridad y cordones detonantes.
Designación de personal competente
El operador de la mina debe designar a una persona competente y mayor de 21 años para encargarse de los explosivos. Esta persona debe tener conocimientos y habilidades en el almacenamiento, la manipulación y el uso seguro de material explosivo, garantizando así que todas las operaciones se realicen bajo los más altos estándares de seguridad.
La manipulación y almacenamiento de explosivos en minería requiere de un estricto cumplimiento de normas y protocolos de seguridad para prevenir accidentes y proteger la vida de los trabajadores. Las directrices proporcionadas por la OIT son esenciales para establecer un entorno de trabajo seguro y eficiente, destacando la importancia de la formación, el monitoreo constante y la implementación de medidas de seguridad adecuadas en todas las etapas del proceso.
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