Los exámenes psicosensométricos son una herramienta vital para evaluar las capacidades y aptitudes de los conductores y operadores en el ámbito laboral, especialmente en industrias de alto riesgo como la minería. Estos exámenes permiten descartar posibles limitaciones físicas, sensoriales y psicológicas que podrían comprometer la seguridad y eficiencia de los trabajadores.
En la industria minera, donde se utilizan grandes camiones y maquinaria pesada, los accidentes pueden tener consecuencias devastadoras en términos de lesiones, muertes y pérdidas económicas. Aproximadamente, el 90% de estos accidentes se deben a errores humanos, lo que resalta la importancia de una selección rigurosa del personal.
Así lo señaló Pedro Acuña, asesor técnico de Alertplus (Chile), en su charla «Importancia de los exámenes psicosensométricos en el ámbito laboral, evaluación psicomotora, factores psicosociales e invocación en el trabajo minero», realizada en el marco de la jornada “Avances en exámenes psicosensométricos”, organizada por el ISEM.
Los exámenes psicosensométricos evalúan aspectos como tiempos de reacción, capacidades cognitivas, aptitudes psicológicas, coordinación visomotriz y tolerancia al estrés y presión operativa. Las pruebas permiten determinar si un candidato posee las competencias necesarias para desempeñar su labor de manera segura y eficiente.
Varios países cuentan con leyes y regulaciones que establecen estándares mínimos para la evaluación de conductores. En Chile, por ejemplo, el Decreto Supremo 170 en minería y la Ley de Tránsito configuran un alto estándar para la conducción.
Sin embargo, es importante que estos estándares se extiendan más allá de la minería y se apliquen también a otros sectores como el transporte escolar, donde la seguridad de los niños está en juego.
Para hacer el proceso más eficiente, algunas empresas mineras han implementado sistemas de evaluación in situ, llevando los equipos directamente a las faenas para evitar traslados y pérdidas de tiempo. Esto permite evaluar a los conductores en su entorno de trabajo habitual, obteniendo resultados más precisos.
Acuña considera que es crucial mantener un monitoreo constante de las capacidades de los trabajadores, ya que factores como la fatiga, el estrés y los medicamentos pueden afectar su desempeño día a día. Un sistema de evaluación periódica garantiza que los conductores mantengan sus aptitudes a lo largo del tiempo.
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