Intendencias regionales y equipos especializados de la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) han realizado visitas de inspección a 27 empresas mineras para verificar el cumplimiento de la normativa actual sobre el cuidado de la salud de su personal ante el avance de la COVID-19.
El superintendente de este organismo, Edilberto Terry, refirió que están esperando la información que se les requirió a estas empresas cuando fueron inspeccionadas. Con esos datos procederán a levantar el acta respectiva.
Precisó que al iniciarse el estado de emergencia nacional los trabajadores denunciaron que las mineras estaban incumpliendo algunas disposiciones legales como la entrega de implementos personales de protección, el aislamiento adecuado o el trabajo solo en actividades esenciales.
Sobre el caso de Antamina, en Ancash, indicó que hicieron tres visitas y que el 18 de abril encontraron un promedio de 400 trabajadores que prestaban labores esenciales. También verificaron que no había actividad productiva. Fue en esa inspección que se enteraron sobre la desmovilización de 210 trabajadores hacia Lima y que cumplían cuarentena en cuatro hoteles.
Terry dijo que las dos veces que fueron a la mina no encontraron trabajadores infectados ni hospitalizados. Posteriormente hicieron un operativo conjunto con la Dirección de Salud de Lima Centro en los hoteles con el fin de verificar el estado de salud de los trabajadores. Se comprobó que había médicos ocupacionales encargados de los trabajadores.
“Nosotros tenemos reunión constante con los dirigentes sindicales de Antamina porque el procedimiento de inspección es bastante detallado. A fines de abril la minera nos ha dado información que le pedimos. También estamos recibiendo información del Ministerio de Energía y Minas. Todo esto servirá para analizar al detalle la fiscalización que todavía no concluye”, señaló Terry.
Al respecto, el gerente de comunicaciones de Antamina, Martín Calderón, sostuvo que esta empresa ha concretado la desmovilización de todos los trabajadores y confirmó que 210 de ellos se encuentran cumpliendo cuarentena en hoteles de San Isidro y Miraflores bajo el asesoramiento de expertos epidemiólogos como Ernesto Gozzer.
“De los 210 casos, 87% resultaron asintomáticos. Hay un equipo de voluntarios, otro de asistentas sociales y también tenemos una central de llamadas para estar en contacto con los trabajadores. Es el compromiso que hemos asumido y que empezó el 13 de abril con la parada estratégica de seguridad, la misma que tiene tres componentes: salud, preparación de la mina para lo que viene y soporte social en favor de las comunidades”, precisó Calderón.
Mientras tanto, en la mina Antapaccay, ubicada en la provincia cusqueña de Espinar, se ha confirmado que ocho trabajadores están infectados con el COVID-19. La Dirección Regional de Salud citó a todas las mineras que operan en Cusco para que se constituyan en unidades epidemiológicas informantes. También para evaluar y verificar que sus planes de prevención, control y vigilancia del virus cumplan con los lineamientos del Ministerio de Salud y de la Dirección Regional de Salud.
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