Un reciente artículo publicado en la prestigiosa revista científica Nature revela importantes hallazgos sobre el impacto del hundimiento de la superficie del suelo causado por la minería subterránea de carbón en gasoductos de alta presión. El documento resalta la necesidad de controlar el socavamiento de los gasoductos mediante observaciones instrumentales y medidas operativas de protección anticipadas.
«La planificación irracional de las operaciones mineras puede provocar la pérdida de estabilidad y la destrucción de instalaciones debilitadas. Por lo tanto, es importante estudiar los procesos de deformación de la superficie terrestre durante las operaciones mineras, lo que garantiza condiciones de operación seguras y sustentables», señalan los investigadores.
Según el estudio, es esencial instalar estaciones de observación dentro de la zona de impacto a lo largo del trazado del gasoducto. Estas permiten monitorear el terreno y prever posibles daños, asegurando la integridad del gasoducto y la seguridad de las comunidades cercanas. Además, los puntos de referencia de las estaciones de observación, hechos de varillas metálicas, se colocan estratégicamente dentro y fuera de la zona de impacto, permitiendo mediciones precisas y seguimiento del hundimiento del suelo.
«La primera observación debe realizarse al menos 3 días después de la colocación de los puntos de referencia (tiempo para la estabilización de los puntos de referencia impulsados). Se debe realizar una medición de control en una semana. El intervalo de tiempo entre las observaciones instrumentales durante el período de desplazamiento se establece dependiendo de la tasa mensual de hundimiento de la superficie del suelo», agregan.
Se recomienda realizar mediciones iniciales y establecer puntos de referencia al menos 2 meses antes de que comiencen las operaciones mineras, con observaciones posteriores a intervalos regulares durante el proceso de desplazamiento. Durante la etapa activa del desplazamiento, se sugiere realizar mediciones mensuales para una vigilancia más cercana.
El estudio destaca la importancia de la planificación y vigilancia cuidadosa para mitigar los riesgos asociados con la minería subterránea en áreas donde existen infraestructuras críticas como los gasoductos. Los resultados proporcionan una guía invaluable para asegurar la seguridad y la eficiencia de estas operaciones en el futuro.
Puedes hacer clic en este enlace para acceder a la publicación de Nature.
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