Los criterios que servirán de base para la elección de un calzado de seguridad abarcan dos aspectos fundamentales (sepa cómo usar y mantener un calzado de seguridad):
- 1º Existencia de calzados con prestaciones adecuadas a los riesgos que hayan de afrontar (proceso de apreciación).
- 2º Elección propiamente dicha (elección de los modelos).
1. Análisis de los riesgos
El calzado de seguridad, como equipo de protección individual que es, debe utilizarse cuando los riesgos presentes en el lugar de trabajo no se evitan con medios de protección colectiva técnicos o bien por medidas, métodos o procedimientos de organización del trabajo (principio de utilización).
El análisis de los riesgos no responde a criterios preestablecidos y debe ser realizado teniendo en cuenta el origen y forma de los riesgos (caídas de objetos, golpes, aplastamientos, pinchazos, etc.).
Por otra parte, el análisis de los riesgos ha de ser lo más riguroso posible, no deteniéndose en simples valoraciones cualitativas. Al contrario, la cuantificación aún aproximada de los riesgos, resulta de gran importancia.
No basta con hacer referencia a riesgos por caídas de objetos o aplastamiento. Habrá de hacerse hincapié en su peso aproximado, alturas de caída, impactos en caída libre o proyectados a velocidad, etc.
Igualmente deben especificarse datos relativos a temperatura y humedad del puesto de trabajo, ambiente corrosivo, contacto con agua, disolventes, líquidos corrosivos o no y cualesquiera otros que ayuden a completar el análisis.
2. Definición de las características necesarias para que los calzados respondan a los riesgos
Una vez analizados los riesgos, se procederá a definir las prestaciones que habrán de tener los calzados de seguridad para responder eficazmente a los riesgos presentes en el lugar de trabajo.
Para ello se tendrá en cuenta una serie de factores que son propios al origen y forma de los riesgos valorados. A modo de ejemplo, y de manera no exhaustiva, se indican algunos de estos factores:
- Resistencia al impacto en caída libre.
- Resistencia a las proyecciones de objetos a velocidad.
- Resistencia al aplastamiento.
- Resistencia a la perforación.
- Resistencia al plegado.
- Resistencia a la corrosión de punteras y plantillas de seguridad metálicas.
- Resistencia a agentes químicos.
- Impermeabilidad al agua, disolventes, etc.
- Características antideslizantes de la suela.
- Cierta resistencia al contacto con partículas incandescentes o a altas temperaturas.
La cuantificación de los riesgos implica la determinación de las prestaciones de los calzados para que estos sean adecuados a los riesgos de los que haya que protegerse.
2.1 Calzados disponibles con las características definidas
Después de definir las prestaciones que habrán de tener los calzados para responder a los riesgos en el lugar de trabajo, el empresario comprobará si existen calzados en el mercado con esas características. Para ello, deberá asesorarse de los suministradores, que tienen la obligación de conocer las características técnicas de sus artículos. Los calzados de seguridad deberán llevar una marca de calidad que garantice el cumplimiento de ciertas características técnicas.
2.2 Limitaciones de los calzados de seguridad
Las características técnicas de los calzados se definen por una serie de ensayos que determinan sus prestaciones mínimas o limitaciones.
Las limitaciones de los calzados de seguridad estarán en función de los requisitos exigidos en normas y documentos técnicos, debiendo entenderse que cualquier calzado con marca de calidad cumple las características técnicas establecidas.
Publicado en la Revista Seguridad Minera nº129.
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