Al estallar un explosivo se trituran las rocas y los gases desplazan a los fragmentos. La onda de choque o detonación, de muy alta velocidad y presión, varía según el tipo de explosivo. Alterando su composición, se pueden obtener explosivos más o menos potentes para rocas duras; más o menos empujadores, para rocas fáciles; y más o menos resistentes al agua, según se requiera.
La capacidad para reaccionar con el fulminante o detonador se denomina sensibilidad a la iniciación, y su capacidad para trasmitir la onda de detonación a lo largo de toda su masa y a otros explosivos, se denomina simpatía. Ambos conceptos son muy importantes respecto a la seguridad de su empleo.
Algunas consideraciones
Los trabajadores deben llevar equipo completo de protección personal y tienen que ser instruidos, previamente al trabajo, sobre los riesgos potenciales de explosión, incluyendo los
riesgos de tormenta y los procedimientos de transporte de explosivos. Todas las operaciones se suspenderán en caso de proximidad de una tormenta.
Las excavaciones por medio de voladuras se ejecutarán destapando suficientemente las rocas que van a ser fracturada para conocer su tamaño, forma, dureza, localización de grietas para orientar adecuadamente las perforaciones. Esta acción debe realizarse de acuerdo a los estudios que indiquen la manera de evitar, al máximo, los perjuicios que puedan ocasionarse en zonas aledañas a la voladura.
Las perforaciones se harán del diámetro, dirección y profundidad técnicamente requeridos. Para proteger al máximo, las estructuras adyacentes, las personas y las comunidades, la zona de voladura se cubrirá con tablones, redes o mallas que impidan el lanzamiento de partículas menores fuera de la zona que se desea controlar.
Riesgos relacionados a la detonación
- La explosión fortuita es la detonación sorpresiva de un explosivo al aire libre, al ser activado por impacto, fuego u otra causa, generalmente debida a descuido o negligencia en su manipulación.
- El tiro prematuro es la detonación adelantada de uno o más taladros de una voladura cuando aún no ha sido disparada, o cuando aún está siendo preparada.
- El tiro retardado es el que sale a destiempo y presenta grave riesgo para el personal.
- El tiro fallado o cortado es el que no se dispara total o parcialmente por falla de los principales elementos, como el detonador, guía o explosivo. Es muy peligroso.
Voladuras
Antes de estallar, se deben proteger las estructuras cercanas a la zona de voladura mediante el uso de mallas con el objeto de evitar la proyección de fragmentos de roca. Los agujeros para la carga con explosivos deben ser suficientemente grandes para insertar fácilmente los cartuchos. Las voladuras se deben efectuar con instrumentos eléctricos y los explosivos y sus materiales accesorios se utilizarán de acuerdo con las instrucciones del fabricante.
No se permitirá que el personal acarree en sus ropas detonadores o cartuchos y las máquinas para las voladuras se revisarán periódicamente de acuerdo a un programa de mantenimiento. Los circuitos se prueban con galvanómetros específicamente diseñados para uso en explosivos.
La persona que hace las conexiones será la misma que ejecuta la voladura. Después de una detonación, se desconectan de inmediato las líneas de encendido de la máquina y no se debe reiniciar la perforación, hasta determinar si quedaron cargas sin detonar. Luego, se procederá a retirarlas.
Transporte de explosivos
En ningún caso los fulminantes, espoletas o detonantes, podrán ser transportados o almacenados junto a los explosivos. La empresa debe colocar señalamientos de aviso, precaución, restricción y prohibición para las actividades de transporte de explosivos.
No se debe llevar explosivos en los jumbos, scooptrams, cargadores frontales y otros equipos pesados. Tampoco sobre las locomotoras y no se debe permitir que hagan contacto con líneas eléctricas activas como las de trolley. Durante el viaje hay que avisar que se está transportando explosivos mediante silbato, circulina, banderines y otros medios para conseguir vía libre. Solamente personal competente y autorizado podrá manejar, transportar y activar los iferentes explosivos o inactivarlos y destruirlos cuando se encuentren deteriorados.
Se atenderán todas las normas vigentes de seguridad que rigen en cuanto a: número de cargas que se puedan activar a un mismo tiempo, longitudes de mecha de seguridad, administración de fulminantes, prevención en caso de tormentas eléctricas, utilización de herramientas metálicas, protección contra humedad, almacenamiento, transporte, o cualquiera otra actividad relacionada con la aplicación correcta de las normas de seguridad.
Almacenamiento
Los explosivos estarán almacenados lejos de fuentes de calor y aislados de la población y se deben guardar los explosivos (dinamita, emulsiones, anfo y cordón) en un polvorín y los accesorios de voladura, en otro. El almacén está construido de mampostería o materiales que eviten la posibilidad de generación de descargas eléctricas estáticas. El almacén debe estar cercado y su acceso está prohibido a personal ajeno al mismo. Además, debe tener señalamientos alusivos al contenido, riesgos, precauciones y prohibiciones.
El almacén deberá estar limpio en todas sus áreas y no existirá pasto ni maleza en sus cercanías. Se deberá disponer de extintores para el combate de incendios incipientes. Todos los explosivos estarán empacados y los empaques indicarán claramente el contenido y sus riesgos. El registro de almacén de explosivos incluye el nombre y forma de los responsables de las entradas y salidas y las fechas de cada operación.
Señalización
La empresa debe contar con señalamientos de aviso, precaución, restricción y prohibición, para las actividades de utilización de explosivos. Antes de efectuar una voladura se circunda una zona de seguridad con señalamientos audibles o visibles y se prohíbe el acceso a todo tipo de personal, hasta que haya pasado el peligro. Asimismo, se aseguran los explosivos de reserva, el personal, los vehículos y el equipo a una distancia adecuada o bajo techo.
En voladuras subterráneas, se avisa a todo el personal que trabaja en el área y se colocan guardias en las entradas para evitar el paso inadvertido de personal. El sistema de señales audibles incluye una señal de aviso cinco minutos antes de la voladura, uno de explosión, un minuto antes de la voladura y uno de fuera de peligro después de la inspección del área de voladura.
Artículo publicado en Seguridad Minera Nº56. pp.24
angel figueroa gonzalez dice
Interesante tener informacion
Seguridad Minera dice
Gracias por seguir nuestra revista. ¡Esperamos que siga visitándonos!
Yuan Jiunn Cheng Lavado dice
Si muy interesante y útil, más por favor más información al respecto de minería por favor
Abraham Lara Medina dice
en mina subterranea que puede pasar si un explosivo no detono y se queda entre la resaga y el scoop lo llega a golpear con el cucharon
Seguridad Minera dice
Gracias por presentar esta consulta. Vamos a considerarla en entrevistas o consultas a especialistas sobre uso de explosivos.
Oscar Mejia Villadiego dice
INTERESANTE !!!